Por Grupo LAR
Comprar un departamento lleva tiempo, esfuerzo y un poco de suerte. Si has conseguido encontrar una propiedad adecuada para ti y tu presupuesto, es el momento de dar un paso más hacia la propiedad de la vivienda solicitando un préstamo hipotecario. Aunque esta es una de las decisiones financieras más importantes que puedes tomar, saber cómo empezar y qué necesitas te pondrá un paso por delante de otros posibles compradores.
Una hipoteca, también conocida como crédito hipotecario, es un acuerdo entre tú y un prestamista hipotecario para comprar una vivienda. Este acuerdo escrito otorga a los prestamistas el derecho legal de recuperar la propiedad si no se cumplen las condiciones de la hipoteca.
El pago de la hipoteca se realiza a lo largo de un número determinado de años, en función de la cantidad prestada y del tipo de interés aprobado. Por lo general, al principio pagas más capital que intereses. Con el tiempo, pagarás más capital que intereses hasta liquidar el saldo.
Contar con respuestas precisas a las preguntas de la solicitud de un préstamo hipotecario puede evitar sorpresas una vez que este proceso comience. Si proporcionas los documentos hipotecarios correctos por adelantado, probablemente tendrás una experiencia hipotecaria más sencilla y rápida.
La puntuación crediticia es como una carta de presentación de tus finanzas. Por lo general, esta puntuación mide qué tan responsable has sido al solicitar préstamos de dinero y pagarlos en la fecha indicada.
Una entidad financiera revisará tu solicitud de hipoteca para comprobar si cumples los requisitos. Por ello, al principio de este proceso debes asegurarte de que el prestamista que finalmente elijas sea el adecuado para ti.
Cuando solicitas un préstamo hipotecario, te estás comprometiendo con una entidad financiera. Por eso, es importante que no solicites una cantidad más grande de la que puedas permitirte. Decide cuál es tu nivel de comodidad de pago. Recuerda que los prestamistas no evalúan tu estilo de vida ni tus gastos personales diarios, así que cuando elijas una cuota mensual, asegúrate de contar con tus gastos diarios también.
Haz una lista de empresas hipotecarias y solicita presupuestos de al menos tres o cinco prestamistas. Asimismo, puedes emplear una herramienta de comparación de tipos para que los prestamistas se pongan en contacto contigo antes de rellenar una solicitud de préstamo hipotecario.
Una vez completados los pasos anteriores, el proceso de solicitud en sí debería ser rápido y sencillo, ya que solo tienes que decidir cómo quieres presentar la solicitud. Cada prestamista está obligado a proporcionar un presupuesto de préstamo. Te recomendamos conservar copias de cada presupuesto que recibas para negociar posteriormente el tipo de interés y los gastos de cierre.
Ahora que ya sabes qué es un crédito hipotecario y cómo solicitar uno, podrás adquirir la vivienda de tus sueños. Con estos consejos estamos seguros que podrás adquirir una buena oferta a un tipo de interés que te puedes permitir. ¡Esperamos que esta información te haya sido de ayuda!
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