Por Grupo LAR
El estilo nórdico, también conocido como escandinavo, ha ganado popularidad en el mundo del diseño de interiores por su enfoque minimalista, funcional y acogedor. Este estilo se caracteriza por sus líneas limpias, colores neutros y la incorporación de elementos naturales que crean espacios armoniosos y tranquilos. Si estás pensando incorporar este estilo en tu departamento nuevo, ¡este artículo es para ti!
El estilo nórdico se centra en bases claras, donde el blanco es el color protagonista. Por tanto, el interés visual se centra en la combinación de materiales de diferentes texturas naturales, sobre una base siempre clara y sobre todo luminosa.
Los principales materiales utilizados en la decoración de estilo nórdico son el cuero, la lana, el algodón, el lino y la madera clara. Estos elementos son los responsables de dotar a los espacios de la calidez y el confort propios de este estilo.
Cabe destacar que un aspecto muy importante a la hora de enfocar la decoración de espacios es elegir los muebles adecuados, según tus gustos y el espacio que tengas disponible para decorar. Hay miles de tendencias que seguir, diferentes estilos en los que inspirarse y cientos de combinaciones posibles.
Si deseas darle a tu departamento un toque nórdico, hay varias consideraciones a tener en cuenta. La primera es que los muebles deben ser funcionales y cómodos, con líneas suaves, rectas y limpias y diseños muy sencillos.
Este estilo destaca por el uso de muebles atemporales y sin adornos, fabricados principalmente en madera, lo que favorece la sensación de calidez y confort. Al ser un estilo tan versátil, es posible combinarlo con otros estilos como el rústico, el clásico, el vintage o el industrial, que son totalmente compatibles entre sí.
El diseño nórdico surge en los países del norte de Europa, donde los inviernos son muy fríos y las personas tienden a quedarse en casa. Por este motivo, las casas se decoran de forma sencilla y funcional, donde cada elemento tiene un uso útil. Por eso, se busca fomentar la conexión entre el exterior y el interior y para ello se suelen utilizar plantas, que aportan color y vitalidad a cada rincón.
Uno de los puntos más importantes es la luz. Los países escandinavos no son precisamente conocidos por sus largos días soleados. De hecho, pasan gran parte del año a oscuras, por lo que aprovechan hasta el último rayo de sol. Por eso, el principal objetivo de la decoración nórdica es aprovechar la luz al máximo.
En consecuencia, el uso de bases blancas es la forma ideal de multiplicar la luz en el interior de la estancia, evitando que ningún rincón quede a oscuras. Otra de las claves para recibir la mayor cantidad de luz posible es olvidarse de las cortinas oscuras, es mejor dejar las ventanas al descubierto o con cortinas claras para que haya luz natural y dejar el espacio lo más despejado posible.
El diseño nórdico combina líneas limpias y una estética minimalista con la artesanía tradicional y elementos multifuncionales, lo que significa que la base de la decoración nórdica es la sencillez y la practicidad.
Se trata de un estilo versátil que ofrece mucho espacio para la autoexpresión, pero ayuda a crear interiores luminosos y aireados. Bonito y sencillo, el estilo nórdico también se adapta a los espacios modernos que requieren productos funcionales y adaptables que resistan el paso del tiempo.
En este estilo predominan las líneas rectas y las curvas suaves, que pretenden crear espacios diáfanos y lograr una armonía despejada. Cuando se trata de elementos decorativos, como cuadros o cojines, opta por patrones geométricos que aportan orden y sencillez.
En segundo lugar, destacaremos los elementos naturales para decorar el hogar. Los elementos hechos a mano y los objetos de madera son algunas de las piezas más utilizadas para transportarnos a la parte más nórdica de la decoración, en la que sirven como elementos decorativos ideales.
Como curiosidad, te diremos que un elemento muy característico de los países nórdicos es el fuego, que nos recuerda a la parte más primitiva de estos países. Por ello, las velas son un elemento esencial a la hora de evitar la temida oscuridad escandinava y entrar en contacto con la magia nórdica.
Hasta aquí llegamos con los consejos para lograr una decoración estilo nórdico en tu departamento. Ahora estás listo para disfrutar de un departamento que no solo sigue las tendencias de diseño, sino que también se convierte en un rincón personal que refleja tu estilo de vida y personalidad. ¡Bienvenido a tu nuevo hogar nórdico!
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