¿Cómo cuidar los pisos laminados en tu departamento? 7 increíbles consejos que debes conocer

Tu departamento nuevo en Lima es un espacio que refleja tu estilo y personalidad, y los pisos laminados son una elección sofisticada que añade calidez y modernidad a tus espacios. Sin embargo, para mantener su atractivo a lo largo del tiempo, es esencial conocer las mejores prácticas para el cuidado de los pisos laminados.

Entonces, si deseas saber cómo cuidar los pisos laminados, ¡este artículo es para ti. Estos revestimientos no solo son estéticamente agradables sino también una elección práctica y resistente. A continuación, te presentamos los mejores consejos para mantener este tipo de piso como nuevo. ¡Comencemos!

Por ese motivo, te recomendamos invertir tiempo en una limpieza adecuada y suave, lo cual contribuirá significativamente a la durabilidad y la estética de tus pisos laminados. De esta forma, disfrutarás de un ambiente elegante y limpio.

Cuando inviertes en el costo de instalar un nuevo suelo laminado, es posible que hayas recibido instrucciones de limpieza del fabricante. Si aún las tienes a mano, son tu mejor referencia a la hora de elegir los productos adecuados.

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Cualquier producto o artículo que arañe, restriegue o raspe es una mala noticia para tus suelos laminados. Las esponjas de acero rayan tu suelo laminado, mientras que los limpiadores fuertes pueden despojarlo de su capa protectora. Incluso una escoba de cerdas duras es algo que debes evitar.

El polvo puede hacer que tu suelo laminado, antes brillante, parezca apagado y sucio, especialmente cuando se deja allí durante un tiempo. Para limpiar tu suelo laminado puedes emplear un paño de microfibra seco de forma interdiaria o al menos una vez a la semana. Otra herramienta útil es la aspiradora. Solo debes asegurarte de que no haya nada en el fondo que pueda rayar la superficie de tus suelos.

Tu suelo laminado no es impermeable como las baldosas tradicionales. Las diferentes opciones de suelos tienen diferentes pros y contras, y un “contra” del laminado es su vulnerabilidad a los daños causados por el agua.

El agua puede filtrarse en las grietas, causando hinchazón o burbujas antiestéticas, por lo que no se puede limpiar con un paño mojado. Por ese motivo, cuando limpies tu suelo laminado, lo mejor es utilizar un limpiador neutro y un paño de microfibra húmeda.

Si la mancha requiere algo más fuerte que los limpiadores aprobados para laminados, tienes otras opciones de limpieza. El alcohol etílico en una concentración del 70% o un quitaesmalte de uñas pueden eliminar marcas como las de lápices de colores o tinta.

Las manchas más resistentes, como las de chicle o comida seca, se eliminan con una herramienta sin filo, como un cuchillo de plástico. Te recomendamos evitar los utensilios metálicos o afilados, ya que pueden dejar marcas.

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La mayoría de los productos de limpieza indican los tipos de suelos para los que están indicados, así que asegúrate de leer las etiquetas. También puede hacer un limpiador casero con agua y un chorrito de detergente. Aún más importante que lo que usas es lo que no usas. Estos son los productos que no debes emplear en tus suelos laminados: